Las personas usuarias del Centro Ocupacional Municipal “El Molino” han disfrutado de una salida de cinco días en Burgohondo (Ávila), una experiencia pensada no solo como ocio, sino como parte de un proceso fundamental de participación social, autonomía y bienestar personal.
Durante la estancia, han paseado por el pueblo y la naturaleza, compartido juegos, risas y conversaciones, han salido a tomar algo y han disfrutado simplemente de estar juntos. Pero más allá de las actividades, lo importante es lo que estas vivencias aportan:
- Mejoran la autonomía y la toma de decisiones, permitiendo que cada persona elija, participe y se exprese.
- Fomentan la convivencia, el apoyo mutuo y el sentimiento de pertenencia.
- Refuerzan la autoestima, al sentirse valorados, escuchados y capaces.
- Aumentan el bienestar físico y emocional, gracias al movimiento, el ocio, el entorno natural y el descanso.
Las salidas como esta son un espacio de aprendizaje real: compartir mesa, pasear por el campo, reír durante un bingo o un juego, conversar en la plaza o bailar juntos se convierten en momentos que fortalecen vínculos y generan recuerdos positivos.
Desde Fundación Aldaba continuamos apostando por experiencias que promuevan una vida plena, participativa y llena de oportunidades para las personas con discapacidad. Porque crecer, disfrutar y sentirse parte del mundo es un derecho de todos.



























